Cuevas prehistóricas: Covalanas, Cullalvera y del Valle.

Cueva de Covalanas

La cueva de Covalanas se encuentra a 3 kilómetros escasos del centro de Ramales y hay que reservar con anterioridad ya que debido al pequeño tamaño de la cueva y por razones de conservación el aforo queda limitado a 7-8 personas por visita. Avisar también que a diferencia de la cueva de Cullaveras aquí hay una cuesta larga y empinada hasta la entrada. Imposible subir con carro de bebés, menos mal que nosotros porteamos, eso sí, el paisaje es una pasada, así que si vas con tiempo disfrutar de la naturaleza que te rodea es un plus.

Las pinturas mas interesantes de esta cueva, en la que no dejan tomar fotos aunque sea sin flash, son
las 18 ciervas rojas, pero también puedes descubrir un caballo, puntos, líneas... Parece que son más antiguas que las pinturas encontradas en la más famosa Altamira, y que fueron hechas hace unos 20.000 años.
La cueva de Covalanas fue declarada Patrimonio de la humanidad por la Unesco en el año 2008 y por lo que nos dijo el guía hay que aprovechar su visita porque se irá dificultando para las personas que no son especialistas e incluso restringiendo como en Altamira.

Cueva de Cullalvera

Si lo importante de la cueva de Covalanas son sus pinturas, en Cullalvera la protagonista es la naturaleza.

Situada en el centro de Ramales, casi sin esperarlo nos encontramos con una cueva monumental. Cómo estos días ha estado lloviendo tanto hemos tenido la suerte de ver el río que se encarga de horadar la cueva y que normalmente es subterráneo. De los 12 kilómetros que tiene el complejo kárstico de esta cueva se recorren unos 400 metros por una pasarela que la hace apta para todos los públicos. Se pueden ver estalactitas y columnas, algunas bailando. Maravillosa la geología de la cueva, las explicaciones y el entorno.

Las pinturas rupestres que se encuentran en su interior no son visitables porque para acceder a ellas habría que cruzar un lago de agua bastante fría y quedan restringidas para afortunados espeleólogos.

Del largo vídeo explicativo del principio sobra cada minuto, pero la historia de la cueva es muy interesante y la entrada más que recomendable.

Cueva del Valle

A pocos kilómetros de Covalanas y Cullalvera, en la localidad de Rasines se encuentra el parque paleolítico de la Cueva del Valle, un sitio con mucho encanto. El parque es pequeño pero está en plena naturaleza y en los paneles informativos se encuentra muca información. Desde el parking hasta el parque hay un camino un lavadero de mineral y una antigua mina, con orígenes al parecer romanos.

Una vez en el parque puedes atravesar el río Silencio por puentes o piedras estratégicamente colocadas, descubrir un mamut a tamaño natural, y por supuesto ver algunas de las formas que nos deja este ecosistema kárstico: surgencias de manantiales, pequeñas galerías, lapiaces,..

La Cueva del Valle no tiene pinturas, y el trozo que se puede visitar no es muy grande a pesar de tener más de 60 kilómetros de profundidad,  pero el acceso es libre y la parte que pudimos ver nos permitió sentirnos como aprendices de espeleólogos.

Sin ser tan impresionante como Covalanas y Cullalvera es una excursión que nos gustó mucho ya que te permite hacer un poco de senderismo, aprender cosas curiosas, vivir pequeñas aventuras saltando el río y descubriendo la cueva... Ideal para ir con peques.