Lo toman sin azúcar, pero acompañado de un montón de frutos almirabados y otros dulces, por lo que no resulta nada amargo.
La ceremonia del té es muy importante allí, y como en el resto de regiones de Asia, primero se vierte en una taza, que vuelve a la tetera, al menos en un par de ocasiones.
A todos los invitados se les ofrece siempre una taza de té y la tradición dice que cuanto menos té lleven la taza, en mas estima te tienen.
De allí, además del té nos trajimos dulces y frutos varios, que están riquísimos, pero con los que hay que ser cautelosos, porque podrían causar diabetes en menos de una semana...
Las teteras típicas son de cerámica, como la de la foto que hicimos en Bukhara, muy decoradas, normalmente pintadas a mano, y los vasos como tazones sin asas, a juego.
La verdad que son muy chulas pero no nos atrevimos a traer tan frágiles materiales en nuestras mochilas, así que con la tetera de latón que trajimos de Marruecos nos apañamos.
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Nos hace mucha ilusión leer tus comentarios, saber si te ha gustado lo que has leído o no, si te ha resultado útil...
Anímate a darnos tu opinión o preguntarnos tus dudas.
Prometemos contestar!!!!